Madrid, 4 de mayo del 2023.- Esta división, reduccionista, es la que necesita cualquier compañía para vender a los públicos más exigentes. División porque los profesionales de contar el día a día de una empresa tienen un perfil muy diferente respecto a los fabricantes de anuncios publicitarios (Copywriter).
Las redes sociales y plataformas digitales han «otorgado» a las marcas corporativas algunas características propias de un ser humano: diálogo, atracción, sentimientos, recomendaciones…Una compañía utiliza el lenguaje para saludar digitalmente a diario, establecer debates, encuestas o sencillas conversaciones con su comunidad de clientes y seguidores. Y tiene que contar historias de la empresa para atraer la atención de sus consumidores. Historias propias, historias de terceros, historias de sus clientes, historias de sus empleados, historias de sus productos y servicios.
Este volumen de información exige un trabajo diario de estrategia, planificación, distribución, seguimiento, cumplimiento de resultados y mejoras constantes. Además de una prueba continua de las nuevas herramientas y canales de comunicación digital. La comunicación tradicional (prensa, radio y televisión) mantiene las mismas reglas de actuación sin innovaciones.
Por lo tanto, las historias reales de las empresas son las que dibujan el propósito de la compañía, el compromiso con la sociedad, el prestigio corporativo, la credibilidad y autenticidad de la marca. En definitiva, construye el pasado, presente y futuro de las compañías.
Por otra parte, los creadores de anuncios buscan la mayor y más rápida efectividad en la interacción con los mercados. De hecho, gracias a la publicidad existen la prensa, radio, televisión, redes sociales y plataformas digitales.
La publicidad es «esclava» del aquí y el ahora. No recordamos todas las campañas de publicidad de una marca en los diferentes momentos del año. Salvo los grandes anuncios de grandes marcas. Y los anuncios nacen y mueren, aunque se los busque. Sin embargo, las historias tienen vocación de permanecer y siempre están en los buscadores de Internet. Quizás por todos estos resultados, el profesional creador de historias debe ser diferente al profesional creador de anuncios.
¿Y su empresa qué resultados reales ha obtenido con sus historias diarias y con sus anuncios?.
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Manuel Carrillo, Director Comunicación Digital Corporativa, Medios Informativos y Marca Personal 
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